Ya se ha presentado aquí el jueves, llegando con la previsión de lluvias debajo del brazo y con una bajada generalizada de las temperaturas. Aunque estáis de suerte: mis menús de recetas siempre os darán calorcito cuando haga falta, estando pensados para degustarse en casa, en buena compañía y resguardados de las inclemencias del tiempo. Y para muestra, el segundo plato que os traigo hoy, habiendo apostado por ingredientes accesibles sin que por ello se menosprecie su sabor ni presentación. ¿Os apetecen unas Pechugas de pollo con salsa de mostaza? Pues aquí vengo yo con ellas; se trata de un plato muy sencillo de preparar con el que lograréis sorprender a vuestros invitados, siendo apto también como menú diario. Y con el equilibrio en calorías, por supuesto, asegurando la delicia en cada mordisco. ¿Me acompañáis por la elaboración de las Pechugas de pollo con salsa de mostaza? Pues vayamos con ellas, que estarán listas en poco más de quince minutos.
Ingredientes
- 600 gramos de pechuga de pollo.
- 600 gramos de caldo de pollo ya preparado.
- 170 gramos de nata líquida.
- 1 vaso de vino blanco.
- 1 cucharada sopera de mostaza antigua.
- Arroz para el acompañamiento.
- 1 cucharadita de café de mantequilla.
- Sal, pimienta, aceite de oliva y perejil picado.
Preparación
Empezamos cortando las pechugas a tiras no demasiado finas. Las doramos ligeramente en una sartén con un poco de aceite, las retiramos del fuego y las reservamos. Después, y en la misma sartén, añadimos la mostaza y el vino blanco. Calentamos, dejando que se evapore el vino en unas 3/4 partes, e incorporamos entonces el caldo de pollo y la nata. Cuando arranque el hervor, añadimos las tiras de pollo y dejamos cocer hasta que la salsa se espese. Apagamos el fuego y añadimos la mantequilla, mezclando hasta que se una con la salsa.
Cocemos arroz para servir de acompañamiento con el plato.
Montaje del plato.
Servimos las Pechugas de pollo con salsa de mostaza en un plato de presentación, colocando en un costado la guarnición de arroz blanco. Decoramos espolvoreando una pizca de perejil picado por encima.
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Que buena pinta!!!