Pequeños consejos para hacer más llevadero el síndrome postvacacional
No tenemos que deciros lo que cuesta que vengan las cosas buenas y lo rápido que se esfuman en cuantos éstas han llegado, ¿verdad? No: todo lo bueno se acaba, por lo que hay que prepararse para ello. Ay, que a las vacaciones les queda un suspiro… Pero bien que puede ser el mejor de los suspiros porque, como suele ocurrir,…