Llegó el turno de nuestro postre, seguro que lo estabais esperando con ganas. Y es que este plato es el más esperado de cualquier menú de recetas, tanto por aquellos a los que más les gusta el dulce como por quienes sólo lo prueban de vez en cuando. ¿No es el postre el momento en el que más creatividad se pone encima de la mesa? Y no hay más que experimentar para comprobarlo, sobre todo si es con una receta tan clásica como la que os he preparado para hoy: Tejas con chocolate y naranja. Las tejas son una especie de galleta curvada preparada de forma tradicional y clásica, que resulta bien sencilla de cocinar si sabéis cómo hacerla. Y la receta de hoy es un buen comienzo, vais a preparar uns Tejas con chocolate y naranja con las que dejaréis sin palabras. Os lo garantizo.
Ingredientes
- 30 gramos de harina.
- 20 gramos de almendra picada y cruda.
- 40 gramos de mantequilla.
- 50 gramos de azúcar glass.
- 3 yemas de huevo.
- 100 gramos de chocolate negro de cobertura.
- Ralladura de naranja.
Preparación
Mezclamos en un bol mediante una espátula la harina junto con el azúcar glass y la ralladura de naranja. Incorporamos las yemas de los huevos y 10 gramos de mantequilla fundida y a temperatura ambiente, removiendo el conjunto hasta obtener una pasta homogénea.
Precalentamos el horno a 180 º C. Extendemos un tapete de silicona sobre una bandeja de horno o, en su defecto, papel de horno, y vamos vertiendo sobre la superficie la masa a cucharadas, extendiéndola ligeramente con la propia cuchara y guardando suficiente separación entre una lámina de masa y otra. Espolvoreamos la harina molida por encima de la masa y horneamos durante unos 6 minutos.
Una vez horneadas, es cuando hemos de darle la forma de tejas actuando rápidamente y antes de que la galleta se enfríe. Con ayuda de un rodillo, sacamos varias tejas del horno, estando recién hechas, y las colocamos en su superficie, adaptándolas al rodillo para que obtengan su forma curvada. Actuamos de igual forma con el resto de tejas, manteniendo en el horno las restantes mientras las vamos doblando. Depositamos las tejas ya dobladas en una fuente, para después bañarlas en chocolate.
Calentamos al baño maría el chocolate con cuidado de que no le entre ni una gota de agua y, cuando esté deshecho, añadimos el resto de mantequilla, mezclando hasta que quede homogéneo. Sumergimos una a una las tejas en este baño de chocolate hasta la mitad y las espolvoreamos con ralladura de naranja, dejando que el baño se solidifique.
Montaje del plato.
Servimos las Tejas con chocolate y naranja sobre una fuente de presentación, pudiendo acompañar la degustación con un vino dulce.
