¿No se os ha hecho corta la semana? No porque yo haya venido por aquí sólo tres días, sino porque, en general, los días pasan más rápido de lo que tardamos en comernos un buen postre. No falla: basta que algo sea una delicia para que transcurra todavía más rápido, siendo un aspecto que también se aplica a los dulces. Y por extensión, además de por lo atractivo de su propuesta, la Sopa de yogur con queso de cabra y pera se degusta en un suspiro. Combinación de lácteos para comer con cuchara rematada por fruta, una presentación que sorprende a la vista, sabores que deleitan al paladar… Podría estar definiendo la receta hasta el infinito, pero no me acercaría al placer que tendréis si la preparáis en casa. Hacedme caso: esta Sopa de yogur con queso de cabra y pera es para chuparse los dedos.
Ingredientes
- 3 yogures naturales.
- 60 gramos de queso de cabra en rulo.
- 1 cucharada sopera de miel.
- 2 peras conference.
- 1 cucharada sopera de azúcar.
- Un poco de mantequilla.
Preparación
Juntamos los yogures, el queso de cabra sin la piel y la miel dentro del vaso de la batidora y batimos bien, guardando el resultado en la nevera.
Calentamos un poco de mantequilla en una sartén y salteamos en ella la pera cortada a dados pequeños y pelada. Añadimos el azúcar, removemos hasta que la pera adquiera un tono rubio y la retiramos del fuego, dejando que temple.
Montaje del plato.
Llenamos con la sopa de yogur y queso de cabra un plato hondo y asentamos en el centro un montoncito de pera. Rematamos la presentación vertiendo unos hilos de miel por encima.
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