El viernes se ha presentado por fin, y también lo hace en nuestro menú de recetas, adoptando la variante más dulce: el postre. Porque a nadie le amarga un dulce y todos repetiríamos de este último plato, hoy voy a plantear un postre que está a caballo entre la crema y la fruta, consiguiendo ese equilibrio perfecto entre estos dos ingredientes con el que seguro sorprenderé a los más golosos: Mousse de chocolate blanco y fresas. Fácil de cocinar, rápido y delicioso, ¿que más se puede pedir? Pues unos ingredientes comunes y económicos, como los de esta receta. Quizá las fresas no estén aún en temporada, aunque no se usa mucha cantidad para este Mousse de chocolate blanco. ¿A que os pica la curiosidad? Pues ya sabéis, los pasos para elaborar este postre están justo aquí mismo…
Ingredientes
- 200 gramos de fresones.
- 30 gramos de azúcar.
- 170 gramos de chocolate blanco de cobertura.
- 1 clara de huevo.
- 150 gramos de nata para montar.
- Chocolate negro rallado.
Preparación
Cortamos los fresones a dados pequeños y los colocamos en un cazo al fuego junto con el azúcar. Dejamos que cueza lentamente hasta obtener una especie de almíbar y retiramos del fuego esperando a que se enfríe.
Derretimos el chocolate blanco al baño maría. Por otro lado, montamos la clara y la nata a punto de nieve, en recipientes separados. Juntamos el chocolate derretido con la nata montada haciéndolo muy suavemente con ayuda de las varillas manuales, incorporando después la clara de igual manera. Por último, vertemos el sirope de fresa, dejando enteros los trozos.
Montaje del plato.
Servimos el Mousse de chocolate blanco con fresas en copas de postre, espolvoreando por encima una pizca de chocolate negro rallado.
Observaciones.
-Este Mousse de chocolate blanco con fresas no debe de guardarse más de 5 días en la nevera.
¿Os ha gustado esta receta? Pues podréis prepararla todavía más rápidamente si visitáis nuestra sección de cocina, estando justo tras la imagen.