Esta semana es bastante especial en muchas regiones de España, ya que el sábado se celebra la noche más larga del año: la noche de San Juan. Y como corresponde a una celebración que se enrosca casi en el principio de los tiempos, trae asociadas un montón de costumbres culinarias que han ido arraigando a lo largo y ancho de todo el territorio, de las cuales os propondré un par de muestras para este menú, ambas dulces. Pero antes de que empecemos con esas recetas, hoy elaboraremos algo artesanal que tampoco suele faltar en ninguna celebración: un Licor de cereza. O la base para que preparéis cualquier licor casero, sólo tendréis que cambiar el ingrediente de temporada por cualquier otro que se os ocurra y que sea adecuado para la maceración. ¿Queréis saber cómo elaborar este Licor de cereza? Pues sólo requiere unos cuantos pasos, 1 mes para que macere y todo un año para disfrutar de él a pequeños sorbos…
Ingredientes
- 1/2 kilo de cerezas maduras.
- 200 gramos de azúcar.
- 1 clavo de olor.
- 1/2 palo de canela en rama.
- 750 gramos de Brandy o Cognac.
Preparación
Retiramos el rabo de las cerezas y las lavamos bien, secándolas con un trapo. Introducimos las cerezas ya limpias junto con el resto de ingredientes dentro de un tarro hermético y removemos con una espátula, cerrando el tarro y manteniéndolo en un lugar fresco y oscuro. Removemos de vez en cuando y, cuando ya haya transcurrido más o menos un mes, colamos el licor de cereza guardando el resultado en botellas de vidrio bien tapadas.
Montaje del plato.
Servimos una copa de Licor de cereza en las mejores ocasiones, siempre sin abusar ni de esta ni de ninguna otra bebida alcohólica. Este licor aguanta en botella sin estropearse durante aproximadamente 1 año.